MITOS SOBRE EL ENTRENAMIENTO

LO QUE A MUCHOS NOS CONTARON Y QUE NO ES VERDAD EN ABSOLUTO

En el mundo del fitness hay muchísima información circulando y más aún desde que las redes sociales están en pleno auge, pero no toda es precisa. Los mitos del entrenamiento pueden retrasar tus progresos e incluso provocarte lesiones y otros problemas. En este post, vamos a desmentir algunos de los mitos más comunes sobre el ejercicio y la pérdida de peso. Descubre la verdad detrás de estos conceptos erróneos y mejora tu camino hacia tu mejor versión. 

«Si no me duele, es porque no he hecho un buen entrenamiento»

Muchas personas creen que el dolor muscular es sinónimo de un buen entrenamiento, de estar consiguiendo más y mejores resultados. Pero no. 

Aunque un poco de dolor después de entrenar puede ser normal, sobre todo al probar una rutina nueva, entrenar con dolor constante no es necesario para ver resultados ni aconsejable. El dolor excesivo puede ser una señal de que te estás sobreentrenando o acercándote a una lesión. Lo más importante es mantener una rutina de ejercicios efectiva y escuchar siempre a tu cuerpo. Es muy importante no forzarse. Si hoy no llegas a las 15 repeticiones, no pasa nada, con constancia llegarás de forma segura y disfrutando el proceso. 

«Levantar pesas me hará muy musculoso/a»

Uno de los mitos más populares, especialmente entre mujeres, es que el entrenamiento con pesas te hará «demasiado grande». Y siempre les decimos lo mismo cuando nos transmiten esta inquietud: ¡Ojalá fuera tan fácil!

La realidad es que ganar  masa muscular requiere tiempo, mucho esfuerzo, una dieta orientada al crecimiento muscular, constancia y paciencia. Levantar pesas te ayudará a tonificar y a quemar grasa de manera eficiente sin que por ello vayas a crecer muscularmente de forma exagerada. Si tu objetivo es mejorar tu salud y apariencia, el entrenamiento de fuerza es clave.

«Para perder grasa, solo necesito hacer cardio»

El cardio es excelente para quemar calorías y para mantener tu corazón en forma, pero no es la única forma de perder grasa. De hecho, el entrenamiento de fuerza juega un papel crucial, ya que aumentar la masa muscular te ayuda a quemar más calorías en reposo. Pasa como con los coches, cuantos más caballos y cilindros tienen, más combustible gastan. Con nosotros ocurre igual, un cuerpo tonificado y con musculatura gasta más energía para realizar cualquier tarea, incluso respirar. 

Una combinación de ejercicio cardiovascular y pesas es lo más efectivo para la pérdida de grasa y el mantenimiento de la masa muscular.

«Sudar más significa que quemo más calorías»

El sudor no es un indicador directo de cuántas calorías has quemado. Es simplemente la forma en que tu cuerpo regula su temperatura. Puedes tener un excelente entrenamiento sin sudar mucho, especialmente en actividades como el yoga o el entrenamiento de fuerza. La clave está en la intensidad del ejercicio y no en cuánto sudas.

«si hago muchos abdominales tendré un vientre plano»

Muchos piensan que hacer cientos de abdominales es la clave para conseguir un abdomen plano. Sin embargo, los ejercicios abdominales por sí solos no queman la grasa localizada en el abdomen, que es lo que realmente oculta tu musculatura. Para reducir la grasa abdominal, necesitas un enfoque integral que incluya una dieta equilibrada, ejercicio cardiovascular y de fuerza, 

«Hay que entrenar todos los días para ver resultados»

El descanso es una parte fundamental del progreso. Entrenar todos los días sin descanso puede provocar agotamiento, fatiga muscular y aumentar el riesgo de lesiones. Para obtener los mejores resultados, es importante alternar días de entrenamiento intenso con días de descanso o descanso activo con actividades más ligeras como caminar o estiramientos. El descanso adecuado mejora la recuperación y el rendimiento a largo plazo.

«Los carbohidratos me hacen ganar peso»

Este mito es muy común en el mundo de la nutrición. Los carbohidratos no son tus enemigos. De hecho, son una fuente importante de energía, especialmente si entrenas con regularidad. Lo importante es elegir carbohidratos complejos (como granos enteros, frutas y verduras) y consumirlos en las porciones adecuadas. Con una dieta equilibrada y adecuada a tus necesidades, los carbohidratos te ayudarán a rendir mejor en tus entrenamientos.

¿TE GUSTARÍA PROBAR KLIMB?

En Klimb queremos que pruebes nuestro sistema de entrenamiento y por eso ponemos a tu disposición un START PACK a precio muy reducido.